9/8/11

MONUMENTALES CONCIERTOS DE ASIA Y ZZ TOP. CRÓNICA JM DUKE


Otro de nuestros fieles oyentes palmerinos, JM Duke (vaya la tropa tan fantástica que tenemos en La Palma!!!), no ha perdido el tiempo y ha sido testigo de los fenomenales directos que dos clásicos de la talla de ZZ TOP y ASIA celebraron en Málaga y Córdoba respectivamente. Pincha en leer texto completo (bajo la imagen) para acceder a la crónica.


ASIA: Sólo acierto a comentar que son unos pedazos de músicos... Si Steve Howe te deja con la boca abierta, Carl Palmer (vaya solo de batería, platillos y gong incluidos) hace que te caiga la baba; Geoff Downes es increible y John Wetton sigue teniendo un buen tono vocal. Evidentemente no se mueven como los del 'Circo de Sol' con una pierna, pero tampoco les hace falta. Digo esto porque se escuchan comentarios que te hierven la sangre; que si están muy viejos, que si no se mueven, que si  van a morir en el escenario... Particularmente, cuando voy a un concierto (de calidad), espero que me ofrezcan un buen sonido y una buena interpretación, y esto es lo que hicieron estos cuatro señores, de los que no esperaba menos; estuvieron ahí desde el inicio hasta el apoteósico final con "Heat of the moment". Al final se dejaron ver fuera de la sala, firmando y charlando un poco con el personal que les esperábamos, prometiendo que volverían (imagino que con Yes, pues en el concierto anunciaron que era el último de Asia como grupo). Por cierto, había representación de Huelva y Sevilla entre el público.
ZZ TOP: Genial concierto, magnífica puesta en escena (entre barbas, sombreros y la espectacular pantalla de video gigante en la que ofrecían imágenes de sus vídeos más emblemáticos y otras). Billy Gibbons toca la guitarra mejor incluso de lo que se le oye en disco. Dusty Hill con la voz más "funky" le secunda de forma genial y Frank Beard lleva el ritmo del concierto y del grupo milimetricamente. En lo positivo me quedaría con la calidad, el ritmo (ningún solo instrumental), el sonido y la puesta en escena. El único pero sería los escasos 85 minutos que duró el show. Esto no me gustó nada, pues los precios de las entradas están cada vez más elevados (y además hay que contar los kilómetros que tenemos que hacernos y las peripecias para ir a los conciertos). Mucho hablar de los fans pero luego no se enrrollan mucho (a no ser que se llamen Obús...).